La bodega Pazo de Barrantes es la hermana perfecta de Marqués de Murrieta, así la describen ellos mismos y prueba de ello es este magnífico Albariño que se ha convertido en uno de nuestros blancos favoritos del año. Es herbal, profundo y está en el momento idóneo para ser abierto y disfrutado. Les advertimos que una botella para compartir se quedará corta…
Don Luciano Murrieta elaboró el primer “vino fino” de La Rioja allá por el 1952, siendo además el primero en exportarlo fuera del territorio nacional. Viajó a Burdeos para aprender las técnicas de elaboración allí empleadas y, reproduciendo las técnicas aprendidas y el concepto de Chateau francés, comenzó a elaborar sus vinos en la Finca Ygay, construyendo así todo un icono en el mundo vitivinícola de nuestro país. En la actualidad, y tras pasar a ser propiedad de la familia Cebrián-Sagarriga Condes de Creixell, ponen en marcha la Bodega Pazo Barrantes en los terrenos en propiedad familiar del Valle del Salnés, Pontevedra, y nace una hermandad entre Bodegas perfecta, entre tintos y blancos, entre Rioja y Rías Baixas, siguiendo siempre el alto listón de los grandes vinos.
"2015 está resultando una de las mejores añadas de los últimos tiempos; un año en botella ha hecho que este vino sea más armonioso y matizado, con pronunciados aromas balsámicos, un toque herbal y aromas de flores blancas, manzanas y algo de pimienta blanca. En boca es terriblemente equilibrado, combinando potencia y finura, con una sutil acidez muy bien integrada. Ha resultado estar en el rango superior de puntuación que anticipé cuando lo probé antes de embotellarlo" (Luis Gutiérrez 91RP)