Las sacas en rama son sacas sin filtrar del mismo Fino Gran Barquero, que muestran el velo de flor en su momento óptimo de desarrollo, esa fina película de levaduras que cubre la superficie del vino, le aporta un carácter aún más intenso y fresco, esa sapidez y salinidad que tanto nos atrae.
Una de las bodegas emblema de Montilla-Moriles es Perez Barquero, que lleva desde 1905 cuidando con esmero, rigurosidad y también con magia, todas las labores que giran alrededor de la creación de estos vinos tan especiales. Desde la selección de los mejores pagos de viñas (albarizas de la Sierra de Montilla y de Moriles Altos), la recolección, transporte y molturación de la uva, hasta la elaboración del mosto nuevo, su cata y selección previas al destino final que, según sus características, serán las botas de crianza en la amplia gama de vinos de la zona.