La Syrah de este monovarietal procede de cepas de unos 20 años, de pendiente media, arcilla y piedra caliza en la parte baja y una capa granítica en la parte superior. Las uvas se despalillan del 85% al 100%, dependiendo de la añada. Maceración en cubas de hormigón durante cuatro semanas. Crianza en barrica de 12 meses, con el 20% en barrica nueva y ocho meses en tanque de cemento. Vino con carácter, aromas y sabores a fruta roja confitada, y delicados taninos.
Michel Chapoutier se describe como un "cazador de terroir". Tiene terruños y bodegas repartidas por media Europa, desde el valle del Ródano, el lugar donde nació, a Rosellón, Australia, Portugal y España, en zonas donde nadie se atrevería, él insiste en sacarles todo el jugo posible. Y lo consigue. Prueba de ello es que en 2017, recibe en nueve de sus vinos, los 100 puntos Parker. Palabras mayores, pero que no nublan sus objetivos. De hecho, cuando le preguntan si ha conseguido todo en el mundo del vino, contesta un rotundo no. Explica que todo cambia, desde el gusto general de las personas pasando por el clima, hasta el suelo, en el futuro inmediato, van a evolucionar. Son elementos influyentes en el vino, pero cambiantes, con lo que seguirá trabajando para conseguir los mejores resultados posibles adaptándose al momento presente.
Una de esas bodegas que adquirió en los últimos tiempos es Ferraton, al norte del Ródano. En 2006 y tras ocho años ejerciendo de consejero para Michel Ferraton, el hijo de Jean O¨ens, Chapoutier coge las riendas de la bodega.