Un Fino que inicia su viaje hacia el Amontillado, un vino denominado Fino Amontillado por bodegueros y expertos, aunque las normas actuales lo hayan prohibido. Un fino antiguo que a lo largo del tiempo transmite el distintivo terruño calizo de los mejores viñedos de uva pedro ximénez de la Sierra de Montilla y los Altos de Moriles. La Bota de Fino n.º 124 “Un fino que va para amontillado…” proviene de la solera más antigua de fino de la Bodega Los Amigos de Pérez Barquero, con sesenta y tres vasijas en tercera, de las cuales Equipo Navazos selecciona doce consideradas especialmente expresivas. La solera estaba en equilibrio, con notas de amontillamiento más evidentes que en la primera edición (n.º 45) y similares a la segunda edición, n.º 85. Como en ocasiones anteriores, elegimos las botas que exhiben claramente el carácter de fino añejo, confirmado por una graduación alcohólica del 16,5%. Un fino verdaderamente viejo, con una edad media estimada de unos 15 años, donde la flor está débil y oscura. En muchos aspectos, este vino es el equivalente cordobés a La Bota de Manzanilla Pasada de Equipo Navazos, con su propia personalidad inherente a las diferencias de terruño, casta y cultura bodeguera entre Sanlúcar y Montilla.