La Bota de Palo Cortado 118 “Pata de Gallina” es un vino tradicional jerezano poderoso y elegante, elaborado a partir de vinos con crianza oxidativa. Este método tradicional crea un palo cortado particularmente fino y expresivo, con una nariz muy compleja que combina aromas de oloroso y amontillado con notas cítricas de piel de naranja.
Proviene de una selección realizada hace trece años de las botas más finas mantenidas en crianza oxidativa por el almacenista Juan García Jarana. Este vino ha tenido tres ediciones previas: La Bota de Palo Cortado 34 “Pata de Gallina” en 2012, La Bota de Palo Cortado 72 “Pata de Gallina” en 2017 y La Bota de Palo Cortado 118 “Pata de Gallina” en 2019. Esta es, por lo tanto, la cuarta saca de una pequeña solera de Equipo Navazos, alojada en Fernando de Castilla en un conjunto de botas que llevan su sello.
La edad media estimada de este vino es de más de 30 años.